La creciente conciencia social acerca de la calidad del aire hace que debamos replantearnos el diseño de espacios, por eso una vivienda deber ser más que un inmueble o un espacio donde la familia viva en un entorno saludable. La salud y el bienestar se convierten en un factor imprescindible a tener en cuenta en el diseño y promoción de activos inmobiliarios.
Las marcas empiezan a adoptar nuevas formas de entender el espacio de sus tiendas insignia o “Flagships” porque sus clientes demandan espacios amplios que sean confortables, haciéndoles sentir como en casa en sus decisiones de compra.
Las tiendas deben ser mucho más que un lugar de paso para comprar algo se debe convertir en un entorno dónde los clientes se sientan cómodos y en lo referente a la calidad de aire interior los espacios abiertos juegan un papel fundamental porque una alta ocupación en la tienda sin una filtración adecuada hará que la sensación de “ambiente cargado” este latente en sus decisiones y por consiguiente reduzca su gasto.
Los almacenes de las tiendas, particularmente en la industria alimentaria, producen olores irritantes debido a la emisión de compuestos químicos y orgánicos, frutos de su actividad por ello es vital contar con una correcta filtración de este tipo de componentes para que estos olores no vayan a la zona de venta y el cliente no se sienta a gusto en el entorno.
La propuesta de valor de una Flagship sana es muy potente siendo la calidad del aire interior una clave fundamental en este proceso, por ello la incorporación de soluciones para mejorar la calidad de aire interior afecta tanto a empleados como a los clientes y proyecta los valores de la marcas con un incremento en su reconocimiento y un aumento en el gasto de los clientes.